Cuando pesa un 10 por ciento más de lo que indican las tablas como peso ideal para su edad se considera que es gordo, y obeso cuando sobrepasa en un 20 por ciento (o en más) la cifra que estas tablas muestran como el peso adecuado.
Además de llevarlo al pediatra, los padres deben evitar ofrecerle "comida rápida" (papas fritas, galletitas dulces, caramelos). También es muy importante que jueguen con él para que se mueva y haga ejercicio.
La gordura no es sinónimo de salud o felicidad. "La popular imagen del gordo feliz", no es más que un mito -, porque la mayoría de los niños obesos son intensamente desdichados. No solo tienen que enfrentar a las burlas y rechazos de los otros niños sino que, además, se ven a sí mismos como algo desagradable. Llegan a vivir su gordura como una especie de desgracia que las ha caldo encima cuando lo cieno es que está motivada por malos hábitos adquiridos poco a poco. Si recibe un chocolate cuando está triste, papas fritas cuando se cae en la plaza y, cuando se aburre, una porción de torta el niño puede llegar a confundir cualquier sensación desagradable con el hambre. Con este aprendizaje erróneo, la ansiedad, el aburrimiento o la depresión, lo llevarán inexorablemente a la cocina, donde encontrará un consuelo inadecuado.Si él no adelgaza cabe pedir ayuda. Se hace una evaluación de sus hábitos alimenticios: cuánto come, cuándo, ante qué situaciones, etc., para poder modificar su comportamiento, y se pacta con él la cantidad y calidad de alimentos que ha de ingerir. Seguramente el niño va a cometer errores, pero se trata de que reduzca cada vez más el número de ésos".
1 comentario:
falta justificar algunos textos, la foto de la entrada de futbol es muy pequeña para la proporcion del texto, creo que los colores son atractivos, creo que la calidad de la foto de esta entrada no es la mejor
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